Menorca necesita un pacto para superar el divorcio entre el Consell y el turismo
A la vista del divorcio entre el sector turístico y el gobierno del Consell In-sular de Menorca y las terribles consecuencias que puede suponer para los menorquines y su economía, el Partido Popular de Menorca reclama un pacto de Estado alejado de intereses partidistas en favor del turismo como principal motor del progreso de los menorquines.
Para ello, propone los siguientes puntos:
1. Cesar a la vicepresidenta del Consell Insular de Menorca, Maite Salord, como consellera de Promoción Turística a la vista de su incapacidad para gestionar el área, máxime después de haber recibido la competencia en promoción turística, y de su incapacidad para trabajar de la mano del sector empresarial. Se ha demostrado como un grave error que un partido antiturístico gestione dicha competencia.
2. Pactar entre partidos políticos y las patronales turísticas el nombre de un responsable de Turismo profesional, que haga las funciones de conseller, que tenga continuidad después de las próximas elecciones y cuyo objetivo sea redactar un plan estratégico a largo plazo y la implantación del mismo.
3. El nuevo ‘conseller’ debe tener las manos libres para configurar su equipo de trabajo y éste debe tener garantizada su continuidad tras las próximas elecciones.
4. El acuerdo debería ser suscrito, al menos, por los siguientes partidos y agentes sociales: Partido Popular, Partido Socialista, Més per Menorca, Podemos, Ashome, Caeb, Pime y todas sus asociaciones turísticas, Cámara de Comercio, UGT y Comisiones Obreras. Esta es la mejor fórmula para que hoteleros, agencias de viajes, viviendas turísticas vacacionales, oferta complementaria, sector náutico y trabajado-res estén debidamente representados.
5. El Partido Popular de Menorca propone que el pacto de estado en favor del turismo incluya, al menos, como objetivos prioritarios los siguientes:
-Las políticas turísticas se han de construir a partir de buenas tempo-radas altas, tanto en ocupación como en gasto por turista, por lo que es necesario favorecer y potenciar este periodo como primera medida.
-Menorca necesita un producto que sea capaz de desestacionalizar y generar actividad relevante, al menos y en una primera fase, los me-ses de marzo, abril, mayo, octubre y noviembre.
-Es imprescindible que el producto desestacionalizador vaya acompañado de conectividad aérea.
El Partido Popular actúa a la vista de la parálisis que sufre el gobierno insular, convencido de que Menorca necesita un revulsivo para evitar que se cumplan los vaticinios negativos para los próximos ejercicios que vienen anticipando de forma insistente los empresarios en las últimas se-manas.
Es evidente que si mantenemos la inacción que refleja el hecho de tener un millón de euros en promoción guardados en un cajón y sin ejecutar, los daños serán incalculables y muy difíciles de recuperar.
Los datos de la presente temporada y las previsiones de la futura anticipa un paso atrás que los menorquines no nos podemos permitir.
El Partido Popular, en un ejercicio de responsabilidad, moderación y sentido común sacrifica la oportunidad de realizar críticas al gobierno y ofrece retirar del debate político la gestión turística para propiciar un escenario que permita progresar a la sociedad menorquina.
El Partido Popular reclama a los demás partidos políticos generosidad y estar a la altura de las circunstancias. Los pactos de estado, como fueron los de la Moncloa en la transición o el Pacto de Toledo por las pensiones se han demostrado como herramientas eficaces para resolver situaciones y necesidades complejas.
El Partido Popular entiende que la responsabilidad de liderar este pacto corresponde a la presidenta y secretaria general del PSOE de Menorca, Susana Mora, y la responsabilidad de no hacerlo también será suya, en el caso de que opte por la continuidad.
Los antecedentes en materia de zonificación turística, donde sistemáticamente fueron rechazadas las ofertas de acuerdo del Partido Popular, y en el Plan Territorial Insular (PTI), donde no ha habido ninguna voluntad de pactar con partidos y ayuntamientos su contenido, no invitan al optimismo.