El Parlament reclamará al Gobierno la reapertura de los puertos nacionales como escalas para los cruceros, con un protocolo de control sanitario

La diputada menorquina Salomé Cabrera recuerda que el Govern balear llega con retraso a las actuaciones que han de permitir restablecer las escalas marítimas en los puertos de Baleares con total seguridad.

• El Grupo Popular recuerda que la Comisión Europea allanó el camino a los sistemas de control sanitario, que existe un control estricto en las tripulaciones y que ahora se trata de cerrar las garantías de control en la apertura de los puertos nacionales y la reanudación de las rutas internacionales.

• Salomé Cabrera ha defendido la necesidad de planificación a medio plazo, con mejoras de infraestructuras y sistemas de protección medioambiental, para salvar una actividad económica que es uno de los grandes motores turísticos.

11 mayo 2021.- El Parlament balear ha exhibido hoy un acuerdo unánime sobre la conveniencia de recuperar cuanto antes el turismo de cruceros. Todos los grupos con representación en la Cámara han respaldado la propuesta presentada en una PNL que ha defendido la diputada menorquina Salomé Cabrera para reclamar al Gobierno central la reapertura de los puertos nacionales a las escalas de cruceros.

La iniciativa que propugna el Grupo Popular supone el relanzamiento de un segmento de mercado turístico que aporta dinamismo y es fuente de ingresos en todas las archipiélago. La propuesta, además, pretende cerrar las garantías para dar confianza a consignatarios, navieras y especialmente a los pasajeros que puedan llegar a las islas. Al Gobierno se le pide no sólo que autorice la reapertura de los puertos sino que garantice formas de control mediante un protocolo sanitario relacionado con la epidemia del COVID.

La reapertura de los puertos nacionales a las escalas de crucero constituye, por otra parte, el restablecimiento de las rutas internacionales y responde, como ha explicado la diputada menorquina, al interés de no quedar excluidos en las travesías para evitar también que el interés de las escalas pudiera desplazarse a otros mercados competidores en el futuro. Se trata de estar dentro de las dinámicas del mercado y para ello es imprescindible establecer las garantías de control sanitario.

El Grupo Popular ha recordado en la Cámara compromisos contraídos en acuerdos anteriores que son ahora si cabe aún más perentorios para dar fluidez a la temporada turística.
Así, los grupos políticos han solicitado al Govern balear que trabaja en firme para organizar la llegada de cruceros, cerrar un calendario de escalas tras haberlo negociado con los sectores públicos y privados. Este punto se refiere de forma específica al puerto de Palma, y pretende repartir la carga de cruceristas de modo que puedan distribuirse a lo largo de la semana y ser absorbidos por la ciudad.
Queda también por delante la elaboración de informes técnicos, jurídicos y medioambientales, económicos y sociales para poder gestionar de forma eficaz y eficiente este filón de actividad turística sin que constituya una perturbación y para obtener el mejor rendimiento posible.
Los grupos parlamentarios han incidido también en la necesidad de desarrollar una estrategia turística específica para el turismo de cruceros, con planificación de acciones a desarrollar, estudios de mercado y como una parte más de la estrategias del Plan Anual de la Agencia de Turismo de Baleares, AETIB.

El Parlament considera también necesario que el Govern balear conjuntamente con Autoridad Portuaria impulse la ejecución de infraestructuras y dotaciones necesarias para que durante las escalas tanto cruceros como grandes buques puedan conectarse a la red eléctrica de forma que se eviten o minimicen las emisiones contaminantes. El acuerdo adoptado queda también abierto a otras soluciones que mejoren las condiciones medioambientales en esta actividad.

La diputada Salomé Cabrera ha recordado en su intervención el peso y la repercusión de este segmento turístico en otros tipo de actividades económicas complementarias, desde el comercio, a los taxis, hostelería, consignatarios, guías turísticos y otros servicios se han visto afectados por la interrupción de la actividad crucerística, ha recordado para acabar lamentando la pérdida de empleos y de ingresos económicos.

Los acuerdos que hoy ha adoptado el Parlament tienen toda la carga de apremio para conseguir que esta temporada se reanuden las escalas marítimas.
Salomé Cabrera ha puesto cifra al impacto en el cese y moratoria de los cruceros cuando ha indicado que han dejado de producirse 230 arribadas a los puertos de Baleares. Por todo ello es urgente poner en marcha protocolos de control sanitario, como así han hecho ya comunidades autónomas como Canarias, Valencia, Murcia y Andalucía, para las rutas nacionales.

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