La falta de convicción del Consell ha hecho que perdamos la Menorca Maxi, la Tallship y que la Panerai pase a ser bianual

La portavoz del Grupo Popular en el Consell Insular de Menorca, Salomé Cabrera, lamenta que hoy se confirme lo que ya era más que evidente, la regata Menorca Maxi se ha perdido. Un hecho que atribuye a la falta de convicción del equipo de gobierno del Consell en la defensa de eventos para Menorca, que ha provocado hasta el momento la pérdida de la regata Tallship y que la Panerai pase a ser bianual.

 

“Ni creen, ni quieren, ni se preocupan de saber de turismo”, ha dicho Cabrera, quien tampoco ve una apuesta decidida por el turismo como el sector económico más importante de Menorca y en el que las administraciones, los gobiernos y la sociedad nos tenemos que implicar, con el objetivo de poder hacer una Menorca más competitiva y fuerte,  que dé contenido a la declaración de Reserva de Biosfera.

 

Ha recordado que la regata Menorca Maxi fue una apuesta del equipo de gobierno del Consell Insular de Menorca del Partido Popular, quien entendió que “Menorca debía posicionarse a nivel nacional e internacional, por eventos diferenciadores,  mediante los cuales fuéramos capaces de dar a conocer nuestra isla y nuestro destino turístico, en ámbitos a los cuales, de otra manera, no podríamos haber llegado”.

 

Así, con el proyecto Embajadores, el Consell contactó con empresas, instituciones y personas de reconocido prestigio, tanto de Menorca como de fuera de la isla pero con un fuerte vínculo con Menorca, que estuvieran dispuestos a abrirnos puertas, y todo por su relación y estima a Menorca.

 

A partir de ahí, y entre otros proyectos, salió la posibilidad de llevar a cabo la regata Menorca Maxi, apadrinada y liderada por Alberto Palatchi, propietario de Pronovias, con casa en Menorca y vinculado a la isla desde hace décadas, que siempre ha mostrado un gran cariño por la isla y lo demostró haciendo realidad la regata Menorca Maxi.

 

Durante el pasado mandato, gracias al esfuerzo y la implicación de muchos, de la sociedad menorquina, de los medios de comunicación, del gran trabajo del Club Marítimo de Mahón, del Ayuntamiento de Mahón,  de Autoridad Portuaria, conseguimos que Menorca fuera escenario de una regata única en el mundo.

 

En 2014 y 2015 el puerto de Mahón acogió la mayor flota de grandes cruceros de regatas de alta competición que existe en el mundo, los Fórmula 1 del mar. Un evento que se desarrolló en el mes de mayo, con el principal objetivo de desestacionalizar y abrir opciones fuera de la temporada alta,  además de una inyección económica en múltiples ámbitos: alojamiento, náutica, restauración, comercio, sector servicios, incluso compra de viviendas. Siendo prudentes, se produjo un retorno cuantificable de 1,5 millones de euros.

 

De manera paralela, el Consell llevó a cabo una importante campaña de comunicación en medios especializados náuticos, medios especializados de deporte, en medios tradicionales turísticos, en medios dirigidos a un alto nivel adquisitivo, además de aprovechar el evento para posicionarnos en los mercados tradicionales de Menorca. (TV, radio, prensa escrita y online, revistas especializadas…)

 

“Ahora este esfuerzo común, todo lo que conseguimos, se ha perdido. Lo que está claro es que si no hay un gobierno fuerte que luche por las cosas, solas no vendrán. Y menos cuando regatas de esta índole tienen infinidad de puertos esperándoles con los brazos abiertos, es trabajo de los representantes de los gobiernos, hacer todas las gestiones y contactos necesarios para convencer, atraer y conseguir cosas buenas, que nos hagan mejorar como territorio y como destino turístico”, ha manifestado Cabrera.

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