El Grupo Popular pide anticipar fondos adicionales para Menorca mientras no se apruebe la Ley de Reserva de Biosfera y requiere al Consell que inicie una negociación política
El Grupo Popular en el Consellde Menorca está preocupado por la falta de desarrollo y avance de la futura Ley de Reserva de Biosferaque año y medio después de haber obtenido el visto bueno del Parlament tiene encallada en Menorca la redacción del cuerpo legislativo que se ha de constituir en proyecto de ley.
En marzo de 2019 el Parlament aprobó unánimemente la iniciativa promovida en ese sentido por el Grupo Popular. La entonces diputada Misericordia Sugrañesdefendió ante la Cámara balear la necesidad de que las instituciones autonómicas no quedaran al margen del reconocimiento y la gestión de un título como el de Reserva de Biosfera que llega aparejadas muchas obligaciones y la defensa de una tendencia a compatibilizar el progreso económico con la preservación ambiental es decir, un desarrollo sostenible.
La idea, en realidad, persigue un estatus especial para la isla de la misma manera que en Mallorca y en Eivissa se han desarrollado las leyes de capitalidad de Palma y Eivissa para compensar el mayor esfuerzo que deben aplicar estas dos ciudades en lo que se refiere al despliegue de servicios generales y supramunicipalesademás de infraestructuras, en razón de una preponderancia frente a otras poblaciones y por tener que atender las necesidades de mucha población flotante: más necesidad de aparcamientos, dotación de zonas verdes, limpieza, seguridad, intensidad de transporte público, recogida y tratamiento de residuos, albergues o atención social entre otros muchos aspectos de gestión municipal.
La configuración de Menorca en dos principales polos de población bastante homogéneos y el equilibrio de peso económico, además de razones de rivalidad histórica, no aconsejaba abrir la disyuntiva de una supuesta capitalidad que habría generado polémica y resucitado viejas rencillas.
Sin embargo, como ha recordado la conselleraportavoz del Grupo Popular en el Consell, Misericordia Sugrañes, “Menorca ha quedado hasta ahora al margen de una aportación complementaria como la que sí reciben las otras islas en concepto de capitalidad de cuando en realidad sí que hay muchos aspectos a compensar.”
Los trabajos de redacción de la futura ley recaen en el Consell de Menorca, han comenzado e incluso hubo un período abierto para las aportaciones ciudadanas (enero de 2019), pero el proyecto no se ha presentado aún y la dilatada tramitación parlamentaria que exige una ley ya advierte que no entrará en el periodo de sesiones que acaba de iniciarse. Eso significa que la Ley verá retrasada su aprobación por lo menos a 2021 y las posibles compensaciones tendrían que esperar entonces, como mínimo a 2022.
Por este motivo, el Grupo Popular ha presentado una pregunta a la presidenta del Consell que lleva implícita la inquietud por el retraso en la tramitación pero que, sobre todo, pretende conseguir que el Governbalear anticipe las aportaciones económicas que correspondan mientras no se aprueba la Ley.
Y para ello, la portavoz popular pregunta a la presidenta Susana Mora, qué gestiones está realizando para que los presupuestos del Governbalear del próximo ejercicio 2021 incorporen ya una partida con fondos adicionales para Menorca en concepto de ser un territorio íntegramente declarado Reserva de Biosfera.
Desde el pasado mes de enero (2020), la ciudad de Eivissa percibe 5 millones de euros anuales (70 por ciento procedentes de las arcas de la CAIB y 30 por ciento del Consell de Eivissa) por su estatuto especial como ciudad preeminente en aquella isla. La Ley se aprobó en abril de 2019 (Llei 16/2019 de l’estatut de capitalitat de la ciutat d’Eivissa) y ya los siguientes presupuestos recogían la implicación económica de esa nueva condición.
La Ley de capitalidad de Palma se aprobó por la ley per la Llei 23/2006 de 20 de desembre y también se traduce en un presupuesto anual compensatorio del mayor esfuerzo cotidiano que debe atender el municipio.
La portavoz popular no tiene ninguna duda de que Menorca en su conjunto merece también una aportación suplementaria porque el título de Reserva de Biosfera abarca toda la extensión del territorio, 700 kilómetros cuadrados, y hasta comprende actuaciones en el mar, como es el caso de las reservas marítimas.
Sugrañes considera por todo ello que el Consell de Menorca debe negociar con el Govern balear la llegada de esos fondos y hacer valer la unanimidad parlamentaria que existía sobre este respecto a finales de la pasada legislatura. Se trata, ha comentadoSugrañes, de evitar que la isla siga quedando rezagada en cuanto a la llegada de recursoseconómicos para la inversión y sostenimiento de los propósitos de una Reserva de Biosfera que tiene ya 26 años. “Es justo que la ley recoja el régimen jurídico y económico para dar respuesta a las finalidades de conservación del entorno compatible con desarrollo sostenible de la isla, concluye Sugrañes.